¿Te imaginas una piel 10 años más joven? Es lo que este novedoso y exclusivo tratamiento de Bio-Placenta con Epigenética viene a proponer al estar fundamentado en una proteína de la planta de Agave, bio “idéntica” a la proteína de la placenta humana, excepto que es 100% vegetal. Esta proteína vegetal, al igual que la placenta humana, está repleta de nutrientes para alimentar las células vivas de nuestra piel, impulsar la producción del colágeno y activar la regeneración celular.

Precio del programa de 5 sesiones: 675 €

Sesión suelta: 150 €

Tiempo de la sesión: 1 Hora

Zona de tratamiento: rostro, cuello y escote

Las principales acciones del tratamiento de Bio-Placenta son la nutrición mediante un gran contenido de células madre, y un alto poder regenerativo mediante un proceso en el que las células producen proteínas, oxigenando las pieles más desvitalizadas y apagadas, aumentando la circulación dejando el cutis brillante y con mucha vida, reduciendo las arrugas y los signos del envejecimiento.

¿CÓMO MEJORA LA BIOPLACENTA LA PIEL?

Los estudios clínicos de todo el mundo han demostrado los sobresalientes beneficios de la bioplacenta para la piel, ya que aumenta la oxigenación cutánea y el crecimiento y la reparación de las síntesis de proteínas, algo vital para la renovación celular y la reparación del daño solar y los factores ambientales estresantes, incrementando la oxigenación y aumentando la circulación sanguínea en piel, lo que deja el cutis brillante y con mucha vida; una buena activación y reparación de las síntesis de proteínas son los componentes básicos de una piel sana; la combinación de estos dos mecanismos ayuda a reducir los signos del envejecimiento.

¿Cómo la bioplacenta promueve una piel más joven?

La bioplacenta es un ingrediente sinérgico. Es decir, funciona con más fuerza cuando se combina con otros ingredientes en comparación con sus efectos individuales. A través de la sinergia, la bioplacenta puede atacar las células madre de nuestra piel o, más específicamente, nuestras células epidérmicas de la piel. Ubicadas en las capas más profundas de la dermis, estas son células no desarrolladas que aún no se han convertido en células de la piel. Piensa en ellas como la versión fetal de sus células adultas. Así como una placenta humana alimenta al feto, todavía por desarrollarse, la bioplacenta “alimenta” las células cutáneas no desarrolladas. Normalmente, las células jóvenes emergen tras eliminar las células viejas, para reemplazar el tejido dañado. Entonces, al nutrir nuestras células madre en su estado más temprano, promoveremos una piel más fuerte y más protegida contra los factores ambientales estresantes y la radiación UV. Es decir, el uso de la bioplacenta crea un efecto sobre la piel como si estuvieras entrenando a las células de tu piel para que se comporten más jóvenes de lo que son.

BIOPLACENTA Y GENÉTICA:

El poder antienvejecimiento de la bioplacenta puede explicarse mediante un estudio más reciente llamado epigenética. En el cuidado de la piel, es el arte de entrenar las células de la piel para mejorar su calidad.

CÓMO FUNCIONA LA EPIGENÉTICA:

Aunque nuestros genes son hereditarios, podemos influir en cómo se comportan (hasta cierto punto). Este proceso tiene que ver con lo que se llama epigenoma , el “jefe”  de nuestro ADN que controla nuestras células.

El epigenoma gestiona cómo nuestras células expresan ciertos rasgos como el grosor del cabello y la velocidad del metabolismo. Si bien nuestro ADN nunca cambia, el epigenoma puede agregar o sustraer “etiquetas adicionales” de información a nuestro ADN. De esta forma, dependiendo de nuestras elecciones de estilo de vida y hábitos a lo largo del tiempo, nuestro epigenoma responde creando nuevas instrucciones para nuestras células.

Ahora imagina si pudieras entrenar tu epigenoma para registrar “buenas” instrucciones genéticas para las células de tu piel. Esta ciencia es exactamente la razón por la que la comunidad dermatológica e incluso los cirujanos plásticos están tan entusiasmados con el cuidado de la piel con bioplacenta.

A medida que los productos de bioplacenta aumentan su popularidad como tratamiento para el cuidado de la piel, la industria cada vez muestra más atención a la epigenética.

Las esteticistas están adoptando la tecnología de la bioplacenta para abordar el envejecimiento de la piel a un nivel más profundo. Es un componente muy cercano a nuestra propia estructura celular, por lo que el cuerpo puede absorberlo y reconocerlo casi como propio. Como resultado, sus ingredientes funcionan de forma epigenética, muy por debajo de la superficie de la piel.